Flotabilidad para nadar en playas y piscinas
El mar Muerto es famoso desde su aparición en varios pasajes de la Biblia. Está situado entre las fronteras de Israel y de Jordania y se encuentra a más de 400 metros por debajo del nivel del mar. Este hecho, además, lo convierte en el mar más bajo de la Tierra. Es tan salado porque no posee desagüe, lo cual implica que la evaporación es la única salida del agua, quedando tan solo los minerales y las sales. Pero existen otras curiosidades que lo hacen un lugar muy especial.
Por ejemplo, es el lago más salado del mundo y en él solo algunos organismos microscópicos han conseguido sobrevivir a ese exceso de sal. De hecho, es unas 9 veces más salado que cualquier mar del planeta, una característica que permite que cualquier persona pueda flotar en él.
Además, este lugar está considerado un sanatorio natural, pues en el lago se encuentran disueltos muchos minerales y sales que ayudan a curar afecciones de la piel como la psoriasis, una enfermedad que causa sarpullidos con manchas rojas y escamosas que generan mucho picor.
Desde el punto de vista medioambiental, el mar Muerto plantea un gran problema de cara a las próximas décadas. Y es que su nivel de agua está disminuyendo cada año a pasos agigantados. Esto sucede principalmente a consecuencia del cambio climático y las altas temperaturas que se registran en esa región, donde en verano se pueden llegar a evaporar hasta 7 millones de toneladas de agua en un solo día.
Sin duda, para combatir esas altas temperaturas no hay nada mejor que un baño. Sin embargo, seguramente te hayas dado cuenta de que no es lo mismo bañarse en la playa que en la piscina. ¿No has notado que en el agua del mar se flota mejor que en el agua de la piscina? ¿Por qué sucede esto? En este experimento vamos a salir de dudas.